Beneficios de la meditación

La meditación es una actividad bastante útil para sentirnos mejor, no sólo físicamente, sino, también mentalmente. Aunque hasta hace poco los beneficios de la meditación no eran muy conocidos, y mucha gente pensaba que esa actividad es más propia de los monjes budistas que del resto de mortales, en la actualidad ha ido en aumento su practica. Puede ser practicada por cualquier persona, siendo muy beneficioso siempre, incluso para los niños, al igual que el yoga para niños o el Mindfulness para niños.

Que es meditar

En primer lugar, sería interesante aclarar qué es meditar, o, en qué consiste. Se trata de una técnica de relajación que nos permite conectar con nuestro lado inconsciente. Gracias a la meditación es posible reducir el estrés, la ansiedad o tratar algunos miedos.

Algunos de los beneficios de la meditación son los siguientes:

• El sistema cardiovascular funciona mejor.
• Reduce la inflamación y el dolor.
• Aumentan la atención y concentración.
• Disminuye el riesgo de depresión.
• Reduce el estrés.
• Aumenta la memoria y capacidad de aprendizaje.
• Aumenta la empatía.

Como se medita

Meditar puede parecer una actividad muy compleja, para la cual hay que tener mucha experiencia, pero es más fácil de lo que crees. Simplemente, es necesario tener en cuenta ciertos consejos para aprender a hacerlo correctamente, pudiendo beneficiarte enormemente de sus ventajas y sabiendo que con el tiempo cada vez te será más fácil meditar.

No solo son las ganas sino que también antes de ponerte a meditar debes saber como se medita, ya que para ello necesitarás:

• Escoger una técnica de meditación (hay varias, por lo que es conveniente informarte primero).
• Buscar un lugar tranquilo para hacerlo.
• Tan importante como el dónde es el cuándo. Saca tiempo.
• Escoge ropa cómoda y quítate lo que pueda molestarte, como el calzado o el reloj.
• Busca una buena postura.
• Puedes centrarte en tu respiración o en algún objeto.
• Medita cada día.

Tipos de meditación

Existen nueve tipos de meditación, sirviendo cada uno de ellos para una cosa en concreto.

• Budista. Para estar en el presente.
• Vipasana. Observar cómo son las cosas.
• Zen. Para observar y respirar.
• Mantra. Cantar y vibrar.
• Toglen.  Para conectar con el sufrimiento.
• Dzogchen. Para descubrir el poder interior.
• Chakra. Mejorar el flujo energético.
• Kabbalah. Para acercarse a Dios.
• Trascendental. Liberar la mente.

Ya hemos explicado que dependiendo de lo que se busque conseguir con la meditación, es más común practicar un tipo de yoga u otro, aunque, normalmente, se suelen comenzar con el trascendental, sobre todo, si lo que se busca es reducir el estrés. El zen también te puede resultar útil en ese caso.

Por otro lado, si buscar algo más espiritual o religioso, el Kabbalah será perfecto. Si, simplemente, quieres disfrutar más de las cosas, observando como son, podrías decantarte por el Zen o el Vipasana.

Una vez que tengas claro lo que buscas o necesitas de la meditación, solo necesitarás buscar un poco de información para comenzar. Ten en cuenta que, aunque la práctica no es muy difícil y todo el mundo puede hacerlo, conseguir un buen nivel te llevará tiempo. Es importante practicar a diario y añadirlo a tu rutina para ver los progresos a lo largo del tiempo.