Champú en seco, cómo usarlo y cuáles son los mejores

El champú en seco lleva en el mercado muchísimos años, sin embargo, hasta hace relativamente poco ha tenido una fama inmerecida o no se ha sabido aprovechar las posibilidades que ofrece. Este tipo de champú se puede utilizar cuando tienes poco tiempo y descubres que deberías haberte lavado el pelo, pues, no luce demasiado bien o incluso para generar más volumen en la raíz del pelo. Muchas personas creen que solo es útil en estos casos, y, que las personas que lo utilizan son algo descuidadas con su higiene. Sin embargo, este champú es genial y puede utilizarse en otras ocasiones o por otros motivos. No utilizar un champú adecuado puede ser motivo también para la caída del cabello en mujeres, por lo que es importante conocer tu tipo de pelo.

Cómo usar champú en seco

Ya hemos mencionado que este tipo de champú no es nuevo, aunque, sigue siendo un gran desconocido para muchas personas que, aunque han oído hablar de él, no saben muy bien cómo funciona o como hay que usarlo. Si este es tu caso y sientes un poco de curiosidad, ahora explicaremos paso a paso cómo hay que usar este tipo de champú.

Antes de explicar cómo se usa, es necesario que sepas que hay distintos formatos. El más conocido es el spray, pero ahora también se puede encontrar en espuma o el polvo.

Es champú seco es spray es ideal para el cabello fino. Es el champú más mítico pero es importante utilizarlo correctamente, pues, de lo contrario, podrían quedar residuos. Asegúrate de vaporizarlo a unos 15 centímetros de distancia del cabello, haciéndolo por mechones, desde los laterales al centro, dejando la nuca para el final. Tras hacer eso, quizás notes que las zonas de las raíces o el flequillo aún tienen algo de grasa. Puedes aplicar más champú ya que su cometido es precisamente absorber esa grasa. Mientras lo aplicas ve moviendo el pelo y finaliza cepillándolo.

Después nos encontramos con el champú en espuma. Este formato no deja residuos blancos y es más fácil de aplicar. Quizás pienses que la espuma mojará el pelo, pero se seca muy rápido. Sólo tienes que aplicar la espuma en raíces, nuca y laterales y masajear el cuero cabelludo hasta que se seque. Con este simple gesto, se absorberá la grasa, y, también aportará volumen, todo esto sin apelmazar. Acaba cepillando tu pelo como de costumbre.

Por último, está el formato de champú en seco en polvo. Este es el formato ideal para cuando se tiene el pelo muy grueso o si tienes tendencia a tener mucha grasa. El champú en polvo absorbe mejor la grasa al estar más concentrado. Aunque parezca muy engorroso, es muy fácil de aplicar. Solo deberás aplicarlo en las zonas donde veas más grasa. Para que no queden residuos, basta con sacudir la cabeza bocabajo o echar un poco de aire frío con el secador.

Mejores champús en seco

Existen muchas marcas y formatos de champú en seco, por lo que puede resultar complicado escoger el adecuado para ti. A la hora de comprar tu champú, debes escoger uno que contenga ingredientes naturales. Eso siempre es bueno, pero, sobre todo si tú cuero cabelludo es sensible. Si tienes el cabello teñido, utiliza un champú especial para ello. Estos champús no aportan color, pero sirven para refrescar el que tiene sin importar si eres morena, castaña o rubia.

Algunos de los mejores champús en seco son los siguientes: Perk Up, Dry Shampoo de Moroccanoil, Scalp Revival Charcoal+ biotin, Jet lag de IGK…

Champú en seco inconvenientes

• Este tipo de champú no sustituye al lavado, simplemente, debes usarlo para alargar los lavados entre sí, no siendo recomendable usarlo más de una vez entre lavados.
• No conviene abusar de él, puede obstruir los poros del cuero cabelludo haciendo que se vuelva más graso.
• Puede dejar residuos blanquecinos, por lo que es importante cepillarlo bien tras su uso.
• Si no lo utilizas correctamente o usas uno de mala calidad, el cabello se puede ver sin vida, perdiendo su brillo natural.