Cuidado del cabello después del verano

Después de las vacaciones, una de las cosas que toca poner en orden es el cuidado del cabello. ¡Hoy te enseñamos todos los trucos para devolver la vitalidad a tu melena! 

Y si quieres seguir avanzando con la vuelta, no te pierdas todas las claves sobre la vuelta a la rutina. 

Hidratación para el cuidado del cabello

Uno de los pasos más importantes del cuidado capilar es la hidratación, que ayuda a mantener el cabello sano y con brillo. Para conseguirlo, la rutina de cuidado capilar es muy importante, desde elegir una que se adapte a tu tipo de cabello a recurrir a marcas profesionales. Además de esto, también es muy importante combinar el uso del champú y del acondicionador con una mascarilla semanal y dejar que este producto actué durante unos 10 minutos antes de retirarlos con agua templada o incluso fría para potenciar el brillo. 

Más allá de la ducha, existen también productos sin aclarado que pueden seguir potenciando la hidratación del cabello, ya sea en días de no lavado o antes de cepillarlo. Previa a la utilización de herramientas de calor, es imprescindible el uso de protectores térmicos y posteriormente, conviene aplicar un aceite hidratante que ayude a sellar la hidratación. 

Y además de los cosméticos, beber agua y mantener una dieta equilibrada, rica en proteínas, vitaminas y minerales es fundamental para la salud del cabello. Los alimentos que más favorecen el crecimiento y la hidratación son las frutas, verduras, el pescado, los huevos y los frutos secos. 

Tip estrella: ¡córtate las puntas del cabello!

La forma más efectiva de cuidar la melena después del verano pasa por cortar por lo sano. Y es que asistir a tu salón favorito para cortarte las puntas ayudar a eliminar el cabello dañado y recuperar así la salud de la melena. Da igual que tengas los mejores productos capilares a tu alcance, cuando el cabello tiene aspecto dañado es prácticamente imposible revertir esta situación. Y es que tanto la exposición solar como el cloro de la piscina y la sal del mar resultan muy perjudiciales, provocando puntas abiertas y mucha sequedad. 

Con el corte también evitamos que el daño se extienda al resto de la melena. Cuando el pelo vuelve a crecer sano, tiene menos probabilidades de romperse, se vuelve menos fino y brilla mucho más. Además, con este cambio de look también notarás que el cabello se vuelve más suave y que es más sencillo peinarlo. 

¿Con qué frecuencia debes cortarte las puntas?

Más allá del corte que hacemos con el cambio de estación, la frecuencia con la que debemos cortarnos las puntas va a depender siempre del tipo de cabello y de nuestra rutina capilar, si por ejemplo utilizamos herramientas de calor con asiduidad, como planchas o secadores, que debilitan aún más la fibra capilar. Por norma general, para un buen mantenimiento opta por cortar el cabello cada 6-8 semanas si tienes el cabello fino o cada 10-12 si tu melena es más gruesa y fuerte.

Por otro lado, si estás buscando que el cabello crezca más rápido conviene cortar el cabello con más asiduidad. Esta máxima también aplica a melenas con tintes o productos químicos o si por ejemplo tienes un corte a la altura de los hombros y quieres evitar que este pierda forma.